Un organismo certificador controla los criterios de certificación y los procedimientos de buenas prácticas agrícolas. Pretende incrementar la confianza de los consumidores en la seguridad alimentaria desarrollando prácticas agrícolas que los productores deben adoptar. Un organismo certificador se centra en la seguridad alimentaria y la trazabilidad, aunque también se ocupa de ciertos requisitos relativos a la seguridad, seguridad y bienestar de los trabajadores y la conservación medioambiental. El certificado suele cubrir el proceso de certificación desde antes de plantar las semillas hasta que sale de la granja. En la actualidad, se utilizan distintas normas privadas en el sector de la alimentación. Algunos ejemplos de normas de certificación: BRCIFSGlobalGAP

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